A mí me gusta nombrarlo como actividad diversificadora del tejido industrial y económico del territorio, ya que son recursos y productos que siempre han estado ahí pero que nunca se les ha prestado la atención suficiente o no se les ha dado un valor añadido por falta de inquietudes o miedo al rechazo, ya que siempre han sido recursos básicos pero sin alzar la gran singularidad y autenticidad que los caracteriza.
A continuación cito textualmente las líneas publicadas en el citado medio de comunicación:
Fuente digital Diario Información. 16 octubre 2011
Turismo industrial
ROC GREGORI AZNAR Cuando se manejan las cifras de receptivo turístico que estamos alcanzando en esta provincia, donde se ubican alguno de los destinos más exitosos del Mediterráneo que consiguen atraer a millones de visitantes anuales, con ejemplos tan paradigmáticos como el de Benidorm que recibe unos 5 millones de ellos cada año, se comprenderá que los incrementos no pueden esperarse con grandes cifras (esas ya las tenemos) sino a base de incorporar grupos menores y variados. Parece que sólo los grandes sumandos deberían ser ambicionados para incrementar la suma total, pero es más viable aquí conseguir aumentos a base de pequeños sumandos procedentes de grupos menos voluminosos interesados en experiencias y motivaciones más selectivas. Esto nos lleva a inventarnos nuevos atractivos, a convertir ciertos recursos en productos turísticos que puedan dar como resultado que contingentes menores nos elijan como destino para sus tiempos de ocio.
La Cámara de Comercio alicantina vislumbrando uno de esos huecos dejados por nuestra oferta turística con posibilidades de crecimiento, yo más bien diría con posibilidades de arranque puesto que permanece en estado casi virginal, ha trazado un plan para interesar a las empresas a discurrir por esta nueva aventura que, sin duda, puede redundar en beneficio de nuestra sociedad. La Cámara ha organizado una jornada para concienciar a las empresas industriales para adentrarse en una nueva experiencia consistente en la apertura de sus instalaciones a la recepción de visitantes, en atraer a los turistas. Esta primera jornada titulada "Hacia el turismo industrial en Alicante" se celebró el pasado día 6 de octubre y tuvo como línea argumental el siguiente lema: "Reinventando la industria la industria y el turismo". ¿Pretencioso? Puede que sí; pero a la vez posible y, sobre todo, conveniente. Vale pues la pena plantearlo.
Yo asistí, supongo que como muchos de los que provenimos del sector turístico, para detectar cualquier posibilidad que pudiera derivar en un enriquecimiento de nuestra atracción turística, por ver si este sector pudiera sacar algún provecho, por mínimo que fuera, de las ideas y experiencias que allí se expusieran. Con una buena dosis de escepticismo -todo hay que decirlo- pero abierto a contemplar cualquier novedad u originalidad. ¿Quién sabe?, estos avanzados siempre tienen algo que decir, vamos a ver. La primera reticencia que se me disipó es la de que si esto podría resultar interesante para ofrecer una experiencia más para satisfacer a un cierto grupo de turistas, una fórmula para enriquecer y complementar los atractivos que ya disfrutan un buen número de visitantes. Pues ahora yo diría que sí, que por ese lado, el turismo industrial podría sumarse al inventario como complemento de la tradicional oferta. Más, bien conducido, incluso podría atraer y constituirse en motivación básica para su propio segmento de mercado (reducido, eso sí, no echemos las campanas al vuelo).
Pero eso, con constituir una agradable sorpresa, no fue lo más concluyente. A mí por lo menos, lo que más me impactó y lo que me dio la vuelta como si de un calcetín se tratara fue comprobar que con ser importante para el sector turístico, el turismo industrial, para lo que era de verdad útil era para los industriales. Los ponentes se encargaron de ir desgranando sus posibilidades, disipando las dudas y relacionando las experiencias que ya funcionan (algunas en nuestra provincia). En suma, animando a embarcarse en la aventura, sobre todo a los industriales, repito. La visión optimista dibujada por Charo Navalón, el argumentario positivista expresado por Josep M. Pey y el vasto inventario de experiencias realizado por Javier Díaz Herranz mostraron la validez del proyecto. Como remate tuvo su importancia comprobar cómo entre nuestros industriales ya existen experiencias operativas: la piedra natural, el calzado, el juguete, el chocolate, el turrón, los vinos, entre otros, ya han demostrado que esto puede funcionar.
No se nos presenta un camino exento de dificultades. Siempre convertir los recursos en producto turístico encierra grandes dificultades. Pero, también ocurre con otros casos en los que ha habido que poner en el mercado nuevas ofertas. A esta jornada inicial seguirán otras en las que se irá madurando esta nueva actividad. Quedan grandes incógnitas que resolver, pero si otros lo hicieron (como hemos visto), ¿por qué otros no? Sólo hay una forma de averiguarlo: seguir el programa creado por los responsables de turismo de la Cámara. Con los análisis, el intercambio de experiencias exitosas y buenas y prudentes iniciativas se puede arrancar por este camino innovador, viviendo nuevas posibilidades de desarrollo. No se trata de lanzarse a una aventura del "todo vale", no se trata de una panacea. Se impone una exigente selección en los nuevos proyectos y, sobre todo, se van a necesitar grandes dosis de empeño e ilusión, como las que derrochan los industriales que ahora ya ofrecen sus instalaciones a los visitantes. Pero, para eso, estos empresarios tienen que asumir el liderazgo inicial. Estoy seguro que son ellos los que más tienen que ganar: se trata de la reinvención de sus industrias.
La Cámara de Comercio alicantina vislumbrando uno de esos huecos dejados por nuestra oferta turística con posibilidades de crecimiento, yo más bien diría con posibilidades de arranque puesto que permanece en estado casi virginal, ha trazado un plan para interesar a las empresas a discurrir por esta nueva aventura que, sin duda, puede redundar en beneficio de nuestra sociedad. La Cámara ha organizado una jornada para concienciar a las empresas industriales para adentrarse en una nueva experiencia consistente en la apertura de sus instalaciones a la recepción de visitantes, en atraer a los turistas. Esta primera jornada titulada "Hacia el turismo industrial en Alicante" se celebró el pasado día 6 de octubre y tuvo como línea argumental el siguiente lema: "Reinventando la industria la industria y el turismo". ¿Pretencioso? Puede que sí; pero a la vez posible y, sobre todo, conveniente. Vale pues la pena plantearlo.
Yo asistí, supongo que como muchos de los que provenimos del sector turístico, para detectar cualquier posibilidad que pudiera derivar en un enriquecimiento de nuestra atracción turística, por ver si este sector pudiera sacar algún provecho, por mínimo que fuera, de las ideas y experiencias que allí se expusieran. Con una buena dosis de escepticismo -todo hay que decirlo- pero abierto a contemplar cualquier novedad u originalidad. ¿Quién sabe?, estos avanzados siempre tienen algo que decir, vamos a ver. La primera reticencia que se me disipó es la de que si esto podría resultar interesante para ofrecer una experiencia más para satisfacer a un cierto grupo de turistas, una fórmula para enriquecer y complementar los atractivos que ya disfrutan un buen número de visitantes. Pues ahora yo diría que sí, que por ese lado, el turismo industrial podría sumarse al inventario como complemento de la tradicional oferta. Más, bien conducido, incluso podría atraer y constituirse en motivación básica para su propio segmento de mercado (reducido, eso sí, no echemos las campanas al vuelo).
Pero eso, con constituir una agradable sorpresa, no fue lo más concluyente. A mí por lo menos, lo que más me impactó y lo que me dio la vuelta como si de un calcetín se tratara fue comprobar que con ser importante para el sector turístico, el turismo industrial, para lo que era de verdad útil era para los industriales. Los ponentes se encargaron de ir desgranando sus posibilidades, disipando las dudas y relacionando las experiencias que ya funcionan (algunas en nuestra provincia). En suma, animando a embarcarse en la aventura, sobre todo a los industriales, repito. La visión optimista dibujada por Charo Navalón, el argumentario positivista expresado por Josep M. Pey y el vasto inventario de experiencias realizado por Javier Díaz Herranz mostraron la validez del proyecto. Como remate tuvo su importancia comprobar cómo entre nuestros industriales ya existen experiencias operativas: la piedra natural, el calzado, el juguete, el chocolate, el turrón, los vinos, entre otros, ya han demostrado que esto puede funcionar.
No se nos presenta un camino exento de dificultades. Siempre convertir los recursos en producto turístico encierra grandes dificultades. Pero, también ocurre con otros casos en los que ha habido que poner en el mercado nuevas ofertas. A esta jornada inicial seguirán otras en las que se irá madurando esta nueva actividad. Quedan grandes incógnitas que resolver, pero si otros lo hicieron (como hemos visto), ¿por qué otros no? Sólo hay una forma de averiguarlo: seguir el programa creado por los responsables de turismo de la Cámara. Con los análisis, el intercambio de experiencias exitosas y buenas y prudentes iniciativas se puede arrancar por este camino innovador, viviendo nuevas posibilidades de desarrollo. No se trata de lanzarse a una aventura del "todo vale", no se trata de una panacea. Se impone una exigente selección en los nuevos proyectos y, sobre todo, se van a necesitar grandes dosis de empeño e ilusión, como las que derrochan los industriales que ahora ya ofrecen sus instalaciones a los visitantes. Pero, para eso, estos empresarios tienen que asumir el liderazgo inicial. Estoy seguro que son ellos los que más tienen que ganar: se trata de la reinvención de sus industrias.
Has tocado un tema clave Mª José. La diversificación.
ResponderEliminarMe sorprende que no se mencione el núcleo Alicante-Elx y su capacidad para el desarrollo de turismo industrial.
El planteamiento de esta diversificación lleva más de un año puesto encima de la mesa, cuando se publicó el plan "Alicante, Horizote 2020"... espero que por fin empiecen a trabajar en ello.
Si quieres echarle un vistazo, te dejo el enlace:
http://iei.ua.es/plan-estrategico-alicante/monografias/monografia14.pdf
Gracias Luis.
ResponderEliminarConocía bien el plan estratégico... la pena es que hay varios en la provincia y eso a veces más que ayudar dificulta el conseguir objetivos marcados.
Creo que el problema no es que haya varios, es que no se trabaja en ninguno.
ResponderEliminarSon pensamientos que tengo en voz alta...